Son hermosos los momentos importantes que marcan una "Vida Amorosa". Con mi novio, en su momento, habíamos decido casarnos. Para eso debíamos hacer el primer paso, no por obligación sino por propio gusto... compremos los anillos de compromiso.
Todo un tema, porque en realidad yo no soy vueltera, ni exigente, es mas, le doy mas bola al hecho de comprarlo y usar el anillo que el anillo en si. De mas esta decir que apruebo totalmente los tatoo anillos. Me levanté esa mañana habiendo quedado en encontrarme con mi soquete naranja (léase media), en la famosa esquina de Libertad y Av. Corrientes. Habíamos juntado durante mucho tiempo en una botellita de plástico toooodas las monedas de un peso que teníamos, así llegábamos a comprar los anillos que queríamos. Acto hermoso de la pareja que yo denomino "negocio" porque siempre es un 50 y 50%. Los dos ansiabamos eso y nos hacia felices.
Como el no vivía cerca y viendo la hora me fui a ver una desquería. Ahí encontré uno de los mejores discos en promoción (todavía no entiendo porque), uno de esos que estan en mi Top Five hasta la tumba, Flaming Pie de Sir Paul McCarney. Me colgué viéndolo, y obvio me lo compre. Para cuando vuelvo a ver el reloj decido volver a la esquina y todavía no estaba. Típico que empecé a pensar, este hijo de una gran can no va a venir! Se arrepintió! No me quiere mas!
Ahí mismo, a la hora exacta de demora de esperarlo, pelé mi fabulantastico celu Tango300 y llamo a la casa. Me atiende mi cuñadito que me dice "EL GORDO ESTA ACA DURMIENDO... LO DESPIERTO??".
Ahi me puse a llorar como una descosida!! No podía creer que el muy hijo de puta se había quedado dormido por sentir que perdía la soltería entonces salió de farra... con todas las ilusiones que teníamos los dos!! No podes dejar pasar ese momento sabiendo que para la otra persona, en este caso yo la boluda, es importantísimo. Hablo de la responsabilidad de un momento, que sonara pelotudo y altamente probable a que se haga después... pero la ilusión de ese momento y entrar con la pata izquierda.... eso no me lo borra nadie.
Y la historia siguió con la típica, fue hasta mi casa, compro los anillos, mando flores con un remisero y se compro un combo de mc para comer en la plazoleta de la esquina. Patético.
PD: obvio, nunca me llegue a casar con el... ya me veía esperando en la iglesia ¬¬.